La Institución Benéfico Social Padre Rubinos asegura que, tras la muerte de uno de sus usuarios a manos de otros, ayer, en sus dependencias, quiere volver a la "normalidad" y a seguir trabajando por la inserción de los que, a diario, acuden a sus instalaciones.

"Seguimos por tanto, con más fuerza que nunca, trabajando por paliar sus necesidades, programando nuestra labor de acción social hacia un colectivo de personas que día a día lucha por mejorar su situación, y que en ningún caso se ve representado por hechos como el tristemente acontecido ayer", explica la institución en un comunicado.

El centro se pone también a disposición de la familia del fallecido y muestra su "profundo sentimiento de dolor y afligimiento por la pérdida de una vida humana" y hace hincapié en su necesidad de "recuperar de la normalidad del servicio" del albergue "donde las personas usuarias como siempre vienen haciendo, muestran su capacidad de convivencia pacífica, armonía y de empatía entre sí y con los servicios técnicos profesionales".

Para los usuarios, según destacan desde la institución, el albergue seguirá siendo "su casa".