Dice César Bonilla que las patatas fritas y los churros van siempre juntos y que, de una manera u otra, van ligados a la celebración y a la fiesta, es por ello por lo que, el fundador de Bonilla a la Vista, el nieto del churrero de Ferrol, procura estar "siempre contento". Para celebrar que el local de la calle Galera cumple 60 años, la empresa invita a todos sus clientes a tres churros con el café o el chocolate.

Bonilla recuerda que hubo épocas en las que la chocolatería no cerraba y que, ni siquiera cuando compraron el edificio y lo reformaron, pararon de despachar, tampoco cuando el aceite de oliva escaseaba o cuando las cosas venían mal dadas.

Actualmente, la empresa cuenta con más de ochenta empleados, con seis chocolaterías, todas en la ciudad, y con mercado, sobre todo de patatas fritas, en todo el mundo. En Corea desembarcó en 2016, pero están presentes también en Estados Unidos, Panamá y buena parte de Europa.