La refinería de Repsol trabaja en los últimos trámites necesarios para dar comienzo al proyecto de traslado del 60% de su actividad portuaria a punta langosteira, según informó ayer el director de la instalación, Javier Sancho, aunque todavía no hay una fecha para el inicio de los trabajos. La complejidad de los permisos administrativos para autorizar las operaciones de Repsol en el puerto exterior han demorado el proceso, que según el acuerdo alcanzado por la empresa y la Autoridad Portuaria, fija en el próximo mes de abril la puesta en servicio de la nueva terminal.

Otra de las dificultades existentes es la carencia del poliducto que comunicará el puerto exterior con la refinería, cuyo plazo de construcción es de un año. La declaración de impacto ambiental de este proyecto y del pantalán que Repsol ya fue aprobada, pero están pendientes el proyecto de ejecución y la autorización de la Consellería de Industria antes de que puedan comenzar las obras.