Un año y tres meses de prisión. Esa es la pena que le impuso un juez a un toxicómano que se apoderó de 23 botellas de alcohol del almacén de un establecimiento situado en la avenida de Navarra, en Monte Alto. El sospechoso, según consta en el fallo, el 1 de enero de 2011 accedió al interior del local tras forzar su cerradura. Una vez dentro, sustrajo 18 botellas de coñac y cinco de licor, valoradas en 305 euros.

El juez considera acreditado que cuando cometió los hechos el sospechoso, que es reincidente, era "adicto" a diversas sustancias estupefacientes, entre ellas "alcohol, opiáceos, cocaína y anfetaminas", por lo que sus facultades volitivas estaban "ligeramente mermadas". Por ello, a la hora de dictar la pena tuvo en cuenta la atenuante de grave adicción a las drogas.