El pliego de condiciones con el que se licitará el nuevo contrato de la recogida de residuos establecerá la subrogación de la actual plantilla de Cespa, la anterior concesionaria, para garantizar la conservación de sus puestos de trabajo. También habrá cláusulas sociales que exigirán unas condiciones laborales adecuadas, así como otras de género para fomentar la igualdad entre hombres y mujeres, a las que se sumarán otras ambientales y las lingüísticas para respaldar el uso del gallego por la adjudicataria. El contrato incluirá un "exhaustivo" control de calidad, ya que la facturación mensual que se realizará a la adjudicataria estará vinculada al cumplimiento de las condiciones establecidas. También se apoyará la economía social al exigir a la nueva concesionaria que subcontrate a empresas de este tipo actividades que supongan al menos el 1% del importe total del contrato.