El Ayuntamiento reforzará su justificación para devolver a la parcela de La Solana la calificación urbanística de suelo de titularidad pública antes de la aprobación definitiva y de su remisión a la Xunta, como le aconseja el secretario general del pleno. Con esta ampliación de sus argumentos, busca afianzar su proyecto ante la Xunta, a quien compete la ratificación final del cambio, y ante posibles alegaciones y posteriores recursos, después de que tanto la Autoridad Portuaria como el titular de la concesión, Finisterre SA, las presentaran en el trámite ya superado de evaluación ambiental.

"La intención del Gobierno local -señalaron ayer fuentes municipales- es ampliar la justificación en el momento en que se aborde la aprobación definitiva, siempre teniendo en cuenta la necesidad y el deseo de los vecinos de poder decidir sobre el futuro de su borde litoral, como patrimonio público de A Coruña". El Gobierno local añade también que, en 2012, cuando el anterior Ejecutivo, del Partido Popular, recalificó La Solana de público a privado en el plan general, "no se exigió ninguna motivación".

El Gobierno local considera "suficiente" la motivación incorporada en la propuesta de modificación del plan general que llevará a pleno el próximo lunes para su aprobación inicial. En esa documentación, alega que el cambio de privado a público de la parcela de La Solana en el planeamiento "se fundamenta en la política municipal de garantizar la titularidad pública de los espacios libres y equipamientos" y en el cumplimiento de las mociones aprobadas por el pleno municipal el 9 de enero de 2017.

"Resulta de especial interés la preservación de las características que definen este espacio", justifica el Concello, en aplicación, argumenta, de la Lei do Solo. "Las razones expuestas -concluye- se consideran de interés público suficientemente motivado". En la memoria, prevé hacerse con la parcela de La Solana por expropiación a un precio de 1,4 millones de euros, en los que el Puerto la tasó cuando preveía su venta en subasta pública.

En la memoria de la modificación, el Gobierno local incluye, además, una contrargumentación a las alegaciones presentadas por el Puerto y la concesionaria en el trámite ambiental ante la Xunta, que no entró a analizar su idoneidad porque su intervención en esa fase se limitaba a determinar si el proyecto debía someterse a evaluación ambiental estratégica. El Puerto alegó ausencia de interés público y desviación de poder del Concello, que en el primer caso le replica con su intención de "garantizar la titularidad pública de equipamientos" y en el segundo con que el Ayuntamiento goza de la competencia para la "ordenación de todos los suelos que están en su término municipal". El Puerto presentó estas alegaciones antes de que Xunta y Puertos del Estado anunciaran, en octubre, que garantizarían la titularidad pública de la parcela de La Solana y de los muelles de Batería y Calvo Sotelo.

A Finisterre SA, contraria a separar en el plan general La Solana del hotel Finisterre por "los efectos negativos" sobre este último, el Concello le contesta que ambas son "parcelas catastrales diferenciadas y que tienen regímenes urbanísticos distintos".

Todas las justificaciones municipales precisan, a juicio del secretario general del pleno, "mayor intensidad y extensión" para que el cambio urbanístico "resulte fundado razonablemente". "Requiere una especial motivación que disipe cualquier alegación que pueda producirse de arbitrariedad", aconseja el funcionario sobre el que recae la asesoría legal de la Corporación municipal. En su informe, cita expresamente la posición defendida por el Puerto.