La sección segunda de la Audiencia Provincial suspendió el juicio contra uno de los cinco acusados de vender sustancias estupefacientes en la ciudad. En un principio, el juicio, que no se llegó a celebrar como consecuencia de la huelga de justicia, era contra cinco personas, pero, finalmente, esta semana solo se iba a juzgar a uno de los acusados.
La Fiscalía demanda que sea condenado a tres años y diez meses de prisión. La investigación partió de una denuncia realizada en junio de 2012 por uno de sus compradores de droga, quien aseguró haber sido agredido cuando acudió a una vivienda en la que, presuntamente se vendían los estupefacientes.
En julio de ese año se llevó a cabo un dispositivo policial en dos viviendas en las que residían los procesados. Como resultado de las investigaciones, se concluyó que las cinco personas utilizaban uno de los inmuebles para vender los estupefacientes.
