La concejal de Medio Ambiente, María García, explicó ayer que si los árboles de la acera de la derecha en sentido entrada en la ciudad se deterioran o entrañan un "riesgo para la seguridad" serán retirados de la zona, por la que transcurrirá parte del carril bici metropolitano que todavía no se ha empezado a construir.

"Estos árboles están deteriorados por podas drásticas y por su ubicación en una vía de alta capacidad de tráfico. Estudiaremos la viabilidad futura de estos árboles manejándolos con el mayor cuidado posible. Si en determinado momento hay que sustituirlos por enfermedad o por riesgos de seguridad habrá que abordarlo. De entrada se quedan, nos parece positivo que permanezcan y haremos una monitorización de su estado", comentó María García.

La ejecución del carril bici entre La Marina y el puente de A Pasaxe, que debía haberse iniciado a finales de enero, se pospone por la modificación del proyecto inicial con el fin de evitar la desaparición de estos árboles, la mayoría de ellos olmos. El plan original del Ayuntamiento era plantar los árboles hacia el interior de la acera, pero la Concejalía de Mobilidade ha variado el proyecto para conservarlos en su emplazamiento original.