El púgil Pollito de Troya, al que da vida el cómico Ignatius Farray, cayó ayer derrotado ante Santi, un joven de O Ventorrillo que acudió al show del programa de la Cadena SER La Vida Moderna en Pontevedra. Ambos se enfrentaron en un combate de lucha canaria, en la que la única ley es que "no hay normas". El joven, que estaba sentado en la primera fila, con su chándal y su polo de rayas, se ofreció a contar una anécdota de su familia, que no divirtió ni al público ni a los cómicos David Broncano y Quequé. Para defender su orgullo, se enfrentó a Pollito de Troya y lo derribó, como solo antes habían hecho un campeón de lucha y el cómico Pepe Viyuela. Santi aseguró que había jugado al rugby cinco años.