Ciento catorce días de trabajos en beneficio de la comunidad. Esa es la pena que aceptó un hombre de 31 años que golpeó a su madre, de 51, el pasado mes de enero por haber fumado algunos cigarros de su paquete. El procesado también reconoció ante el juez de Penal 2 que unos días antes a ese suceso, cuando ambos se encontraban en la vivienda que comparten en Palavea, agarró fuertemente a su madre por un brazo durante una discusión y le provocó dos hematomas circulares que precisaron para su curación de una primera asistencia médica. A la mujer no le quedaron secuelas.

El pasado 3 de enero, cuando el imputado se levantó, se percató de que su madre había fumado varios pitillos de su tabaco, por lo que se dirigió a su dormitorio, donde dormía, y le propinó "un fuerte puñetazo en el estómago". La mujer curó de la lesión tras una primera asistencia médica en el complejo hospitalario Universitario de A Coruña.

El sospechoso, además de a 114 días de trabajos en beneficio de la comunidad, aceptó ser sentenciado, como autor de un delito de violencia doméstica, a la privación del derecho a la tenencia y porte de armas durante dos años y tres meses, así como a la prohibición de comunicarse con su madre por cualquier medio o aproximarse a ella, a su domicilio, o lugar de trabajo, durante doce meses. El acusado también deberá indemnizar a la víctima con 60 euros por las heridas que le causó y al Sergas con el importe de los gastos médicos de su atención.