Lleno de ironía y de plena actualidad está el escaparate de la artista plástica Julia Ares, en la calle Curros Enríquez. En un guiño al caso de presunta falsificación de currículo de la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, uno de los maniquíes del estudio de Ares, un torso negro, exhibe una original excusa para no abrir el comercio ese día. Hoy no abro porque estoy falsificando másteres, reza en letras blancas el escrito que luce el maniquí, firmado por la artista, que destaca sobre dos pequeños bustos blancos que lucen collares plateados creados por Ares, especializada en técnicas de fuego.