La principal preocupación de los vecinos de la Ciudad Vieja es la falta de plazas de aparcamiento cuando, al término del curso escolar, el Concello peatonalice la zona. Entonces, los residentes podrán circular a cualquier hora por el barrio, pero no estacionar. El presidente de la asociación de vecinos, Pedro Roque, informó ayer a los asistentes a una reunión en el centro cívico del barrio de que el Ayuntamiento modificó su plan inicial de habilitar plazas de estacionamiento en A Maestranza. A cambio, propone trasladarlas al Oceanográfico, donde habría sitio para un centenar de vehículos.

Como alternativa, el Concello y la asociación de vecinos negociaron con los parkings de pago, quienes aceptaron rebajar sus tarifas a los residentes. O Parrote, ofertará 155 plazas a 80 euros las 24 horas -el precio general es de 155-; Marina Coruña, 60 sitios a 55 euros las 24 horas; y, A Maestranza, 30 estacionamientos a 30 euros, en horario de 09.00 a 21.00, por la semana, y las 24 horas los fines de semana, según indicó Roque. Los vecinos de A Maestranza también tendrán derecho a obtener las tarjetas de residentes, por lo que hay que sumar sus coches a los que a diario duermen en la Ciudad Vieja.

Los afectados consideran insuficientes las plazas que el Gobierno municipal propone en superficie y advierten de que muchos de ellos que no pueden pagar estacionamientos privados, a pesar de la rebaja. La mayoría exige a Marea Atlántica que habilite áreas para aparcar en la zona de A Maestranza, pues denuncian que el Oceanográfico está "muy lejos" de sus viviendas. "A ver quién va hasta allí en invierno a las seis de la mañana o por la noche. Es hasta inseguro", apuntó una de las asistentes al encuentro. "Es un lugar inhóspito", asintió otro vecino.

Los residentes también mostraron su preocupación por cómo se va a gestionar el acceso a la Ciudad Vieja de vehículos sin tarjeta para necesidades puntuales como, por ejemplo, que un familiar vaya a recogerlos a la puerta de sus casas. El control de acceso al casco antiguo, en principio, será policial, según anunció Roque, por lo que los vecinos dudan de su efectividad. "Ya se ve con las tarjetas, que no funcionan. La mayoría aparca dentro de las murallas sin tarjeta y no pasa nada. Al final, van a circular todos los coches", señaló una de las afectadas. Algunos de los presentes en la reunión propusieron sistemas alternativos de control como cámaras de vigilancia. Los asistentes también rechazaron la demanda de los comerciantes de habilitar una zona ORA para que sus clientes puedan estacionar cerca de la Ciudad Vieja porque disminuirían las "ya escasas" plazas que se reservarán para los vecinos. El horario de carga y descarga, al igual que en el resto de zonas de la ciudad, será de 07.00 a 11.00 horas.

La asociación presidida por Roque solicitó al Ayuntamiento el mes pasado que las personas que viven en A Maestranza tuviesen derecho a solicitar tarjetas para aparcar en superficie como los residentes en la Ciudad Vieja. El Ayuntamiento, en principio, solo había tenido en cuenta a los vecinos "intramuros", según el representante del colectivo, quien aseguró ayer que el Concello finalmente dio el visto bueno a concederles las tarjetas.

Las demandas de los vecinos serán expuestas por el presidente de la asociación a los representantes del Ejecutivo municipal en una reunión que mantendrán mañana. El dirigente del colectivo informó a los asistentes al encuentro de que el Ayuntamiento les presentará el plan de peatonalización en detalle a finales de este mes o principios del siguiente. El Gobierno local tiene previsto ejecutarlo en junio.