La época de cría de las gaviotas, en la cual nos hallamos, incrementa la agresividad de estas aves, que no dudan en lanzarse sin dudarlo a por cualquier cosa que les sirva de alimento. Un hombre lo vivió el sábado por la mañana en primera persona en la plaza de Lugo, ya que tras salir de una pastelería con un bollo en la mano, una gaviota se lo arrebató cuando ya se disponía a morderlo, por lo que se quedó estupefacto.