María Jesús Guardado, Cani, fue elegida el sábado secretaria de Organización de la Agrupación Socialista Coruñesa durante la ejecutiva en la que se reorganizó el partido después de las nueve dimisiones formalizadas esta semana. Forma parte del PSOE desde el 76 y, en A Coruña, ha ocupado puestos orgánicos desde hace treinta años.

- ¿Cómo afronta el cargo?

-Me costó aceptarlo por un exceso de responsabilidad y el miedo de no estar a la altura. Los compañeros me propusieron y me aceptaron por unanimidad y me enfrento al riesgo a equivocarme.

- ¿Cómo está el ambiente en el partido tras las dimisiones?

-El ambiente está relajado y tranquilo. El sábado hemos tenido una ejecutiva muy relajada, ha habido cambios en la Secretaría de Organización, pero sin ningún paso traumático, siguiendo los pasos dados por los anteriores compañeros. Yo, como secretaria de Organización, seguiré el camino que había emprendido Fito Ferreiro. Los anteriores hicieron una buena gestión y espero estar a la altura.

- ¿Qué destacaría de la labor de su predecesor?

-Poco tiempo tuvo, pero orgánicamente llevó las cosas al día. No hago de esto una valoración política porque para eso está la secretaria general. Lo que voy a llevar es una coordinación de secretarías y un trabajo orgánico, que es lo que conozco. Soy una militante anónima que llevo mucho tiempo trabajando y casi siempre estuve en el tema orgánico.

- ¿Han dañado al partido las dimisiones?

-Todo lo que sean discrepancias que trasciendan a la calle no nos benefician, pero creo que es fácil de reconducir porque los que han dimitido tienen buena voluntad de continuar con el trabajo, que es lo que nos importa, y hacer un proyecto para esta ciudad.

- ¿Qué medidas son necesarias para volver a cohesionar el PSOE de A Coruña?

-Diálogo. Solo diálogo.

- ¿Se llegará a un acuerdo?

-Desde luego, somos todos compañeros y el proyecto final es igual el mismo. En el camino nos encontramos con diversas sensibilidades, pero el proyecto final para esta ciudad lo tenemos muy en común. En el tema orgánico vamos a continuar como siempre, cohesionando, tratando de ilusionar a la militancia para que salga a la calle a ilusionar al resto de ciudadanos.

- ¿Qué pasos van a dar de aquí a las elecciones?

-Cada secretaría presentará su proyecto antes de verano y se unificará entre todos un criterio. Tratamos de hacer actos informativos, de estar a pie de calle, para en septiembre tener ya una línea trazada con un comité que enfrente la precampaña.

- ¿La conformación de la candidatura ha tenido algo que ver con las dimisiones?

-No, de la candidatura no se ha hablado en la ejecutiva. Y hasta ahí puedo decir. Llevamos muy poco tiempo de rodaje, son tres meses en los que estuvimos inmersos en ciertos actos, en reorganizar hasta encontrarnos a nosotros mismos. Probablemente ahí es donde hubo algún desencuentro. Yo por lo único que abogo es por que no haya grupos, que seamos un grupo cohesionado que sale a la calle con un proyecto. Es lo único que diría y pediría a mis compañeros en general.

- ¿Falta ilusión?

-Han sido unos tiempos muy convulsos dentro y fuera. La ciudad necesitaba un cambio y los números electorales no dieron para un cambio por mayoría.

- ¿Qué expectativas tienen para las elecciones de 2019?

-Salir a ganar, por supuesto. No se ganará, pero salir se va a salir a ganar. Entre nosotros solo hablamos de salir a ganar. No podremos, pero vamos a salir a eso.

- ¿Creen que al PSOE le darán los números para gobernar?

-Yo sí creo, no sé mis compañeros, aunque percibo que sí, desde luego yo sí creo. Soy una militante muy vieja, no doy el perfil muy actual, soy mayor, mujer, ama de casa, pero creo que podemos.

- ¿Qué percibe en la calle?

-He percibido desencanto y pérdida de memoria. Esta ciudad la han construido los socialistas, quisiera que no se le olvidase al electorado. La ciudad de hace 40 años no se parece en nada a la de hoy. Se han hecho cosas grandes en el ámbito social. El proyecto es continuar con eso, mejorar. Es volver a hacer de esta ciudad una de las ciudades importantes de España.