Ana Rodríguez.PontedeumeEl Concello de Pontedeume no cree que la prohibición del botellón sea la solución para los problemas nocturnos que padecen los vecinos durante el fin de semana. "No es la solución adecuada. Desde la Concejalía de Servicios Sociales y Juventud nos estamos planteando otra serie de alternativas", explica la edil titular de este departamento municipal, la popular Ruth García. "El botellón no es políticamente correcto, pero prohibirlo no es que tampoco sea lo mejor", entiende la concejala, que cree que es posible compatibilizar el sueño de los eumeses con las diversiones nocturnas juveniles. "Todos los jóvenes tienen derecho a reunirse, y yo lo entiendo porque también lo soy", afirma. García cree que lo primordial es "concienciar" a la juventud de Pontedeume de que "deje sus desperdicios recogidos" y "no altere el orden". Para la edil del Gobierno local, no es "cuestión del jaleo", porque los eumeses que celebran el botellón acuden principalmente a la estación y los muelles, "sino cómo queda todo después". "Por eso ya hemos colocado un contenedor en las zonas donde se reúnen", asevera la concejala. Además de las medidas higiénicas, el Concello ha decidido tomar cartas en el asunto desde un punto de vista de seguridad y anuncia que próximamente el cuerpo local de policía volverá a patrullar por la noche, previa ampliación de plantilla, para controlar el horario de cierre de los locales de copas y discotecas eumeses y evitar los actos vandálicos que se puedan producir a las horas de la movida nocturna y del consumo de alcohol en la vía pública, dos de las quejas vecinales más recurrentes. Se trata esta de una costumbre generalizada entre los jóvenes eumeses, que se inician ya de adolescentes en la práctica. Más de la mitad (52,6%) de los chicos de entre 12 y 16 años ha participado alguna vez en un botellón, y la quinta parte (26%) asegura que lo hace todas las semanas. Son los datos de una encuesta realizada por la Concejalía de Servicios Sociales en primavera de 2006, entre estudiantes de Secundaria de los institutos de Fraga do Eume, Breamo, Luis Vive y Atocha. "Beber más barato" era el motivo más señalado por los jóvenes para hacer botellón (7,2 sobre 10 puntos). Le siguen "profundizar en las relaciones con amigos" (6,9) y "establecer nuevas relaciones" (6,2). Si la pregunta es "¿Consumes alcohol?", casi el 60% responde afirmativamente.