El Arsenal Militar de Ferrol cederá en custodia al Ayuntamiento de Sada un cañón del siglo XIX para su instalación en la punta de Fontán, junto a los restos que existen de la antigua batería militar, lo que permitirá reproducir en parte la estructura original que tuvo en su época este importante puesto fortificado.

El almirante del Arsenal ferrolano recibió hace unos días al alcalde de Sada, Abel López, quien le explicó su proyecto para el castillo de Fontán y éste accedió a la petición e incluso permitió que personal técnico sadense escogiese la pieza más adecuada.

Tras inspeccionar los distintos cañones de que dispone el Arsenal, los expertos optaron por una pieza del siglo XIX, aunque la batería de Fontán es de la época del XVIII, al ser de mayor tamaño y contar con plataforma de madera -llamada cureña-.

La próxima semana además, el regidor iniciará las gestiones para que el proyecto Ferrol de la Ilustración, cuando opte de nuevo a la candidatura de Patrimonio de la Humanidad, incluya en su documentación

referencias al castillo de Fontán, "dada su importancia estratégica" y porque este antiguo fortín es de la misma

época. Los contactos se establecerán con el Ayuntamiento ferrolano y responsables de la comisión que defenderá esta candidatura.

La batería de costa de Fontán se construyó en su momento para proteger de posibles ataques navales a una fábrica de jarcias y lonas promovida por dos empresarios flamencos, que se ubicó al borde del mar y que fue protegida en todo momento por la Corona española debido a su importancia estratégica. La fábrica sin embargo se trasladó en 1762 a Ferrol, debido a que el Rey consideró que era una villa más fortificada y por lo tanto más segura.

La Junta de Gobierno Local de Sada aprobó en su reunión del pasado viernes el proyecto para convertir este promontorio en un mirador: además de estos restos de las murallas interiores del fortín, cuyos cimientos están siendo excavados, los vecinos y visitantes podrán ver este cañón, y además se instalará una reproducción de una tronera.

En esta zona se instalarán además bancos, farolas y un panel informativo que explicará el origen y la historia de esta fortificación, además de una pequeña zona de aparcamiento. El entorno estará rodeado de césped.

El arqueólogo Antón Malde, que dirige la excavación de las murallas del antiguo fortín de Sada, explica que estos trabajos han confirmado que el de Fontán no fue un "simple baluarte" sino un "puesto artillero importante".

Malde compara Fontán con Baiona, una villa marinera también con un baluarte, pero mientras en Sada esta estructura está "semidestruida", en la localidad pontevedresa se conservó y hoy en día se ha convertido en un "reclamo" para los visitantes.