El editor Eduardo Soto decidió, al saber de la visita del papa Benedicto XVI a Santiago de Compostela, relanzar el libro de Fernando Montaña Adiós a dios, un ensayo en el que el autor critica duramente el catolicismo. Después de esto, Soto quiso llenar los autobuses de la capital gallega con carteles promocionales del libro, para lo cual contaba con un presupuesto de 2.500 euros.

Pero el editor no verá realizado su deseo, ya que Artenosa, la empresa que gestiona la publicidad exterior de las líneas escogidas -7 y P7-, ha echado atrás el encargo, dejando claro que han tratado la propuesta "como otra cualquiera, sin prejuicios". Soto califica esta acción como un caso de "ridícula censura".