Sí, es otro recopilatorio de un músico veterano con vistas a las ventas navideñas. Pero a su autor, Paul Simon, que cumplió 70 años el pasado 13 de octubre, no se le puede acusar de vivir exclusivamente de las rentas artísticas de un pasado glorioso. Este mismo año publicó So beautiful or so what, un álbum que cosechó inmejorables críticas. El repertorio de Songwriter, un doble CD con 32 cortes, fue escogido personalmente por Paul Simon, un músico al que Philip Glass ha definido como "el mejor compositor de nuestro tiempo".

¿Qué músico podía haber compuesto un obra maestra como Bridge over troubled water a los 28 años? Este hito da idea de la calidad de los temas de este disco, compuestos por Simon entre los 21 y los 68 años.

Como corte inédito se incluye The sound of silence interpretado por Simon en directo este mismo año. Otros éxitos popularizados junto a Art Garfunkel que recoge la recopilación son The Boxer -interpretado en el Central Park de Nueva York en 1991- y la citada Bridge over troubled water, en la versión soul de la gran Aretha Franklin.

Otras canciones reconocibles de su carrera en solitario incluidas son Late in the evening, Graceland y Still crazy after all these years.

Sin embargo, este doble álbum se aleja del concepto de "grandes éxitos" al uso al acoger temas apreciados por Simon que pasaron inadvertidos o fueron incluso denostados en su momento.

La elección de las canciones parece subrayar la condición de excelente artesano musical de Simon. "Pienso en mí primero como autor de canciones antes que como artista que graba discos y que actúa en directo -explica el músico de Newark, Nueva Jersey-. Todo eso viene después de las canciones".

La maestría a la que se refería Philp Glass se hace patente en la habilidad de Paul Simon en el manejo de los ritmos, en la elección de acordes sorprendentes y en los giros inesperados, así como en la tremenda calidad de sus letras. "¿Dónde te has ido, Joe DiMaggio?", cantaba Simon en Mrs. Robinson para aludir a una infidelidad. "Cuando estés cansado, sintiéndote pequeño...", empezaba Bridge over troubled water, un himno a la compasión y a la amistad.

Más allá de su etapa con Art Garfunkel, el músico de origen judío ha sabido mantener una carrera interesante, investigando como nadie los ritmos sudafricanos (en el magistral y premiadísimo álbum Graceland, de 1986), los brasileños (The rhythm of the saints, 1990), los latinos y la tradición norteamericana de Nueva Orleans, así como el doo-wop y los orígenes del rock and roll (Quality).

De toda gran película se edita su montaje del director, y aquí Paul Simon recupera escenas musicales eliminadas de su larga y fructífera carrera.