José Manuel Fernández Castiñeiras, condenado por el robo del Códice Calixtino, ingresó ayer en el penal pontevedrés de A Lama, donde empezó a cumplir la pena por esta sustracción en un módulo de convivencia y respeto, sin presos conflictivos, han informado fuentes jurídicas.

El Tribunal Supremo redujo de diez a nueve años la condena que la Audiencia Provincial de A Coruña impuso a Fernández Castiñeiras por el robo del Códice Calixtino, sustraído en julio de 2011 y recuperado un año más tarde.

El alto tribunal ratificó, eso sí, la pena por blanqueo de capitales y la multa de 268.425,11 euros a él y a su mujer, Remedios Nieto, quien vio también corroborada su condena a seis meses de prisión por blanqueo de capitales.