El escritor Miguel de Cervantes tuvo "una relación personal especial" con Magdalena Enríquez, bizcochera, vecina de Sevilla, casada y madre de dos hijos, según José Cabello Núñez, archivero municipal de la Puebla de Cazalla (Sevilla), quien ha investigado esta figura tras hallarla en un documento cervantino.

Magdalena Enríquez figura en las biografías del autor del Quijote, pero su relación con Cervantes fue de tanta confianza que el autor le concedió poder notarial para que le cobrara su sueldo como recaudador de impuestos. El nombre de la mujer figura en dos de los seis documentos cervantinos -uno con firma del autor del Quijote- que Cabello Núñez ha descubierto en los dos últimos años en archivos históricos de Sevilla, hallazgo que ha completado con otros nuevos relacionados con Enríquez que ha localizado en el de Indias y en el de Protocolos Notariales.