El Sevilla de Manolo Jiménez ha comenzado con buen pie su andadura en Europa. Los sevillistas han ganado 2-0 al modesto Unirea Urziceni, con goles de Luis Fabiano y Renato.

El partido se desarrolló casi siempre con el balón en poder de la formación española, que lo movió de una banda a otra para encontrar una vía por donde hacer daño, pero a los de Manolo Jiménez les costó encontrarla y ello también llevó en ocasiones a imprecisiones.

Los locales se armaron de paciencia para intentar no desesperar con el paso de los minutos, pues el encuentro lo tuvieron siempre controlado pero sin la claridad para poner en aprietos al meta Giedrius Arlauskis, pese a los intentos de Jesús Navas, por la derecha, y sobre todo Diego Capel, por la izquierda, de abril las líneas y que el malí Frederic Kanouté y el brasileño Luis Fabiano encontraron sus opciones de marcar.

En la segunda parte, el Unirea no cambió en demasía su disposición táctica y no inquietó al guardameta Andrés Palop, pero el Sevilla tampoco se aprovechó de su superioridad para marcar pronto el segundo, y eso valió para que el conjunto rumano viera la posibilidad de sorprender en alguna contra.

Fue Renato el que a los setenta minutos encontró el premio a su bien partido y, de cabeza, puso ese 2-0 que dejó el partido solucionado para el conjunto andaluz.

De ahí hasta al conclusión, el Sevilla controló y no quiso desperdiciar fuerzas para aprovecharlas en sus próximos compromisos de su apretado calendario, mientras que el Unirea pareció conformarse con no recibir algún tanto más, por lo que el choque concluyó con el 2-0.

Inter-Barça

Debía ser un duelo de artilleros entre dos de los mejores 'nueves' del mundo, el duelo del morbo. Ibrahimovic contra Eto'o, ambos enfrentándose a sus ex compañeros tras protagonizar el trueque del verano.

Sin embargo, Inter y Barcelona empataron 0-0 y a Zlatan y Samuel apenas se les vio, sobre todo a este último, cuya única aparición ofensiva se produjo a poco del final, cuando intentó sorprender a Valdés con una inocente falta lejana.

Ibrahimovic, a quien la afición interista recibió de uñas, no hizo mucho más: dos controles de cierta dificultad tras sendos pases magistrales de Xavi que al final no acertó a rematar.

Con todo, el conjunto azulgrana mereció los tres puntos. Pudo golear cuando peor jugó y apenas dispuso de ocasiones cuando tenía al Inter encerrado en su campo en la segunda mitad.

El conjunto transalpino no exhibió esta noche las virtudes que acostumbra a tener el campeón del 'calcio' ni tampoco las que se le presupone a un claro aspirante a ganar la 'Champions'.

Al Barça le faltó velocidad, organización ofensiva y ese fútbol de posesión y posición en que los extremos abren el campo y los centrocampistas llegan puntualmente para ocupar el espacio.

El Inter, arrastrado por el ansioso Eto'o, presionaba muy arriba al Barcelona para hacerle dudar en la salida del balón. Ese era su plan. Cuando conseguía llevarlo a cabo, robaba el esférico y salía en busca de la meta defendida por Valdés, pero con excesiva precipitación. Cuando fracasaba en el intento, se replegaba entonces con lentitud, dejando al Barcelona contragolpear a su anchas bajo la batuta de su director, un eficiente Xavi.

Un Barcelona más disciplinado e insistente se volcó tras el descanso sobre la portería defendida por Julio César, pero le faltó fluidez para llegar con claridad. Ibrahimovic falló en la ejecución tras un buen control, Messi y Alves se estorbaron a la hora de rematar un tiro cruzado de Henry y Stankovic cometió un claro penalti, al desviar con el brazo un balón, que el alemán Stark no pitó.

Esta vez, Iniesta no fue el revulsivo durante el cuarto de hora que jugó. Zlatan y Samuel no marcaron. El Inter acabó encerrado en su área, pero hoy tampoco era el día del Barça.