Augusto César Lendoiro ha cumplido hoy 65 años, la edad habitual de jubilación, en activo como presidente del Deportivo, al que se incorporó como dirigente el 13 de junio de 1988, hace casi 22 años.

Lendoiro, nacido en la localidad coruñesa de Corcubión el 6 de junio de 1945, ha comandado la etapa más brillante de la historia del conjunto blanquiazul, que ha conquistado un título de Liga, dos de Copa del Rey y tres Supercopas de España durante su etapa al frente de la entidad.

El presidente del Deportivo, que percibe como salario el uno por ciento el presupuesto anual de la entidad, fue el encargado de efectuar el proceso de transformación del club en Sociedad Anónima, de la que fue elegido también dirigente el 30 de junio de 1992.

Con él al frente, el equipo coruñés salió del pozo de Segunda División para abrirse camino entre la elite del fútbol español, primero, y del europeo, después, aunque para poder conseguirlo ha acumulado una importante deuda económica.

Con Arsenio Iglesias en el banquillo estuvo a punto de conquistar la Liga en la temporada 1993-94 y una campaña después se alzó con su primer título oficial de la historia, la Copa del Rey, al que le siguió la primera de las Supercopas que logró, con John Benjamin Toshack al frente del vestuario.

El Deportivo tuvo que esperar hasta la temporada 1999-00, con Javier Irureta como técnico, para conseguir su siguiente título, la Liga, a la que siguieron otra Copa del Rey en 2002 ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu y dos Supercopas.

Además, el equipo se hizo fuerte en el panorama continental con cinco participaciones seguidas en la Liga de Campeones, en la que avanzó hasta las semifinales en la edición de la temporada 2003-04.

Paralelamente a sus éxitos deportivos, Lendoiro se ganó fama de negociador implacable, capaz incluso de fichar jugadores pretendidos por el Real Madrid, como fue el caso del brasileño Flavio Conçeiçao, que después acabó en el conjunto blanco.

Lendoiro logró que en el Deportivo militaran jugadores de la talla de Bebeto, Mauro Silva, Rivaldo, Roy Makaay, Diego Tristán o Francisco González "Fran", con el que no acabó bien la relación.

Aunque recibió importantes críticas en las asambleas de socios que celebró en los últimos años (si bien la más reciente fue bastante placentera para él), en todas ellas sacó adelante por amplia mayoría todos los puntos de cada uno de los órdenes del día, incluso cuando tomó la decisión de suprimir el tope accionarial del uno por cien para cada accionista y apostar por una ampliación de capital que no ha tenido la acogida esperada.

Cuando se hizo presidente profesional del Deportivo, Lendoiro abandonó su carrera política, en la que, como militante del Partido Popular, fue concejal en A Coruña, presidente de la Diputación de A Coruña y secretario general de Deportes de la Xunta de Galicia durante algo más de un año, bajo el mandato de Manuel Fraga Iribarne.

Antes de llegar al Deportivo, Lendoiro fue dirigente del Ural, del que es presidente de honor, durante 27 años, presidente del Español de Santa Lucia, presidente y fundador de la Asociación Coruñesa de Fútbol Modesto, presidente de la Federación Coruñesa de Balonmano y presidente y fundador del Hockey Club Liceo de hockey sobre patines.

Con este último se proclamó Campeón de España, Europa y del Mundo en varias ocasiones y además fue presidente del Comité Organizador del XXVIII Campeonato del Mundo de Hockey sobre Patines, celebrado en A Coruña en 1988, y escribió el libro "Deporte, política y fútbol de bolsillo".