La buena racha de resultados cosechados fuera de casa del OAR se rompió ayer, tras caer contra el Calvo Xiria en un partido eléctrico y en el que ambos equipos tuvieron opciones. El técnico del equipo coruñés, Pablo Aguirregabiria, reconoció que los carballeses comenzaron el derbi con mucha intensidad y sacaron provecho de su precipitación.

Aunque el encuentro se decantó de parte del Xiria, el entrenador señaló que el OAR hizo un "esfuerzo enorme" por sacar adelante su juego. "Nos metimos en el partido en el minuto 40 y remontamos cinco goles, queríamos llegar al final con la opción del empate. La primera parte fue para ellos con clara ventaja, salieron con mucha intensidad defensiva y a nosotros se nos atragantaron todas las situaciones", explicó. La segunda parte se caracterizó por el juego cómodo, la defensa bien organizada y la buena realización.

Aguirregabiria se mostró descontento por el juego del Xiria en la primera parte porque, a su juicio, fue demasiado intenso: "En la primera parte no éramos nosotros y nos sentíamos agraviados. Hubo muchos agarrones y el marcaje fue excesivo. En la segunda los ánimos se apaciguaron, vimos que teníamos opciones de remontar. Me gustó la capacidad de reacción".

El Calvo Xiria ha conseguido así llevarse los puntos que quiere para cumplir su objetivo, que es superar los conseguidos en la temporada pasada.