Quedan cuatro finales y los vaivenes en la clasificación se han ido sucediendo. Equipos que parecían condenados han certificado prácticamente la salvación, como el caso del Levante, mientras que otros conjuntos como el Getafe, se metieron por primera vez en descenso en esta temporada. Lo único que no ha cambiado ha sido el discurso de Miguel Ángel Lotina. "Ya lo dije hace varias semanas, con 38 no nos salvamos pero con 44 no descendemos", repite el técnico vasco. El de Meñaka insiste, además, en que la permanencia pasa por ganar, al menos dos de los cuatro partidos que restan para el final de temporada, el primero de ellos este sábado ante el Sporting de Gijón. "No vamos a pensar en un punto, eso sólo se amarra en los últimos 10 minutos", indica el preparador blanquiazul.

El encuentro en El Molinón se perfila como un nuevo match ball para los deportivistas, que esta vez tendrán que librar una batalla vital lejos de su feudo. Tendrán que romper, además, las malas estadísticas fuera de casa, con dos únicas victorias y las dos en la primera vuelta (Levante y Athletic de Bilbao) y un pobre bagaje de siete tantos a favor y 26 en contra. "Llevamos toda la segunda vuelta sin ganar fuera y estamos buscando una solución, dándole una vuelta. Pero, la clave tampoco pasa por poner dos delanteros", reseña el entrenador deportivista.

No es la primera vez que el Deportivo está en una situación complicada, ya que durante la campaña hubo varios momentos en los que los malos resultados y las urgencias en la tabla pusieron en juego la continuidad de Lotina. Los blanquiazules, sin embargo, se crecieron en la adversidad y consiguieron sacar los partidos adelante, pero siempre en Riazor: Espanyol, Villarreal, Mallorca o Racing de Santander fueron las víctimas del arreón blanquiazul. Pero, para Lotina, ahora se juega algo más y, esta vez, sin el calor de su incondicional grada:

"De estas situaciones ya he tenido yo varias. A nivel personal, hubo varios momentos en esta temporadas complicados, pero no a nivel de equipo. No es el futuro de Lotina, es el del equipo y me siento más responsable. Todos tenemos claro que nos jugamos el futuro del Deportivo", declara el técnico, que reconoce que todos sus jugadores saben muy bien la situación en la que están. "El equipo está muy concienciado y los jugadores no hablan de otra cosa que no sea fútbol". "Hay preocupación pero a la vez con ilusión para salir de esta situación".

Hay intensidad, falta gol

Pese a que la imagen lejos de Riazor no ha sido buena en muchos de los encuentros, Lotina cree que no es un problema de intensidad y hay otras variables que influyen. "Desde el partido de Zaragoza (donde se perdió 1-0) el equipo jugó con intensidad y, aunque no se llegaba a la portería, jugábamos con carácter. Nos han fallado otras cosas. En Alicante (ante el Hércules), por ejemplo, hubo profundidad, porque teníamos el balón pero no gozamos de ocasiones", apunta el entrenador deportivista, que califica de "imperdonable que el sábado no saliésemos con intensidad, fútbol y gol".

El técnico sabe que ahora mismo la unión en el vestuario será fundamental para conseguir la permanencia y asegura que el Deportivo, en ese aspecto, siempre ha sido una piña: "En este equipo la fuerza es el grupo, no las individualidades. No tenemos un Baptista que nos meta cinco goles".

Los resultados, al margen de que el conjunto blanquiazul perdió ante el Atlético de Madrid, no favorecieron los intereses del Deportivo, que perdió cuatro puestos con respecto a la anterior jornada. Las victorias de Real Sociedad y Zaragoza ante los dos grandes fueron lo que más sorprendió a Lotina, que aboga, sin embargo, porque el conjunto blanquiazul se centre en sí mismo: "No es normal que Madrid y Barça pierdan contra rivales que están abajo. Pero, a partir de ahí tenemos que pensar en sacar nuestros puntos. No podemos echar la culpa a otros rivales, pero en la pasada jornada se dieron resultados altamente inesperados". Los blanquiazules son decimoséptimos en la tabla y Lotina cree que eso influye piscológicamente. "Moralmente estar en descenso puede perjudicar a los jugadores. Pero, tenemos que tener en cuenta que la clasificación varía cada fin de semana", recuerda el técnico vasco.