El Barcelona Borges y el Ciudad Real confirmaron el dominio español en el balonmano continental y jugarán hoy (18.00 horas) la final de la Liga de Campeones tras imponerse ayer al Rhein Neckar Lowen alemán y al Hamburgo en las semifinales de la final a cuatro que se está disputando en Colonia.

La disciplina de los azulgrana y su defensa en la segunda mitad fueron los factores claves en el triunfo ante el conjunto teutón. El bloque catalán, con Raúl Entrerríos dirigiendo magistralmente al equipo, fue superior al germano y, de nuevo, el meta serbio Daniel Saric (17 paradas), fue decisivo, como lo fue la gran segunda parte de Marco Antonio Oneto en el pivote ofensivo y la velocidad de los tres extremos: Juanín García, Víctor Tomás y Cristian Ugalde.

Los hombres de Talant Dujshebaev, por su parte, completaron una magnífica segunda parte en la que pasaron por encima de la defensa alemana para sellar su pase a la gran final. Los manchegos se desquitan así de la derrota del año pasado en semifinales contra el Kiel, también en Colonia.

Barcelona y Ciudad Real reeditarán la final de la temporada 2004-2005 (aunque fue a doble partido) que representó el último título azulgrana en la competición.