"Espero que sea mi gran año, pero sobre todo el del Dépor y que suba a Primera", afirma Lassad, que aunque desea que esta sea su mejor temporada, podría ser la última en la disciplina blanquiazul. El delantero de Marsella, que suma su cuarta campaña en el Deportivo, finaliza contrato el 30 de junio de 2012 y, pese a que afirma que su intención es continuar en la disciplina deportivista, reconoce que las negociaciones están "aparcadas". "No había gasolina y el coche se aparcó solo. No puedo decir lo que va a pasar con mi futuro porque no lo sé, pero espero que las cosas vayan bien para mí y para el Dépor", apunta el nueve.

Lassad, pese a desconocer si seguirá en el club blanquiazul la próxima temporada, no oculta su deseo de prolongar su relación con la entidad deportivista. "No va a ser complicado, porque le dije al club que quiero renovar y seguir aquí", asegura, aunque matiza que no tiene prisa por resolver su futuro.

El ariete de Marsella, que lleva cinco goles en esta temporada (dos en Liga y tres en Copa) no ha marcado en los dos últimos encuentros (ante Sabadell y Alcorcón), pero no le preocupa esa circunstancia y aboga por que el grupo consiga el triunfo, independientemente de su aportación personal. "Contamos con un buen equipo y arriba tengo la obligación de meter goles y estoy preparado. Es importante anotar, pero nunca dije que fuese a marcar en todos. Prefiero los tres puntos que un gol de Lassad", declara el punta blanquiazul. Pese a la derrota en Alcorcón, no cree que exista una presión añadida para afrontar el encuentro de hoy ante el Guadalajara y espera, además de la victoria del equipo, que este despliegue un buen juego. "No tenemos presión porque tengamos que ganar sí o sí. Lo más importante es que el equipo juegue bien, estamos en el inicio de la temporada, aunque es verdad que ganar es importantísimo", reconoce.

Competir en casa, ante una afición que sigue apoyando incondicionalmente pero que exigirá resultados, tras el correctivo ante el Alcorcón, es para Lassad un estímulo a la hora de competir, no una losa que soportar. "Vamos a jugar contra el líder de Segunda División, pero estamos en casa y nos apoyarán casi 25.000 aficionados, lo que no es un peso, sino un beneficio para el equipo", aclara el ariete.

El delantero franco-tunecino es consciente de que el Dépor tiene "la obligación de ascender", pero recuerda que todavía "hay tiempo" y apunta que "los puntos vendrán poco a poco".