Rudy Fernández salió al rescate del Madrid para otorgarle la victoria, ante un Blancos de Rueda que, a pesar de realizar un gran último cuarto, en el que puso entre las cuerdas a su rival tras situarse a sólo seis puntos, no pudo ante la calidad del jugador mallorquín y la mayor capacidad reboteadora de los blancos.

Aunque el conjunto madrileñó dominó el choque desde el primer momento, los vallisoletanos no tiraron la toalla ni siquiera cuando el Madrid amplió su ventaja hasta los 18 puntos. El cuadro local salió en tromba en el último cuarto y, contra todo pronóstico, logró situarse a sólo seis puntos (64-70), a falta de seis minutos para la conclusión. Entonces volvió a aparecer la figura de Rudy Fernández para sacar al cuadro blanco del atolladero y aportar la dosis de oxígeno necesaria.