El Málaga, que continúa invicto en la Liga tras cuatro jornadas disputadas, venció al Levante y coge moral para el partido del martes en su debut en la Liga de Campeones, contra el Zenit de San Petersburgo.

El mayor control y dominio del conjunto local fue constante y abrió el marcador Saviola en la mitad de la primera parte. Pese al empate de Míchel al filo del descanso, el equipo de Pellegrini no bajó el ritmo de juego y primero Joaquín y casi al final del encuentro Portillo certificaron la derrota blanquiazul.