El 31 de diciembre es un día de rituales. Cenas de gala, doce campanadas, uvas, champán, brindis y cotillón. Pero también de tradiciones deportivas. La más arraigada es la carrera de la San Silvestre. En A Coruña, gracias al Club Rialto, desde hace tres años se disputa esta prueba después de que con anterioridad, los atletas tomaran las céntricas calles herculinas casi de forma improvisada y sin organización. Tras el éxito de las dos anteriores ediciones, deporte y festividad vuelven a darse cita en esta carrera en la que hay 1.250 inscritos que, a partir de las 17.00 horas y con salida y llegada en María Pita tras recorrer aproximadamente 7.700 metros, despiden el año como todos los populares quieren: con las zapatillas puestas.

A Coruña es una de las ciudades gallegas con más propuestas atléticas tanto para los profesionales como para todos aquellos que simplemente corren por el placer de hacerlo y de mantenerse en forma. Además de las ya tradicionales A Coruña 10, A Coruña 21 y el maratón, se sumó este año el circuito Coruña Corre, con distintas pruebas por los barrios de la ciudad. Por eso no podía faltar una San Silvestre, carrera que une el deporte con la parte más lúdica del día. Por eso no extraña que muchos de los atletas inscritos decidan correr con disfraces, algunos de lo más elaborados. En otras ediciones se vieron cerditos, gladiadores, papá noeles, reyes magos, valientes que completaron el recorrido casi en paños menores e incluso alguna falsa Marta Domínguez. Esta vez hay premio, una vez más, para el disfraz más original.

En cuanto a la parte deportiva, muchos buscan los primeros puestos de cada categoría: sénior (de 18 a 29 años -la prueba es solo para mayores de edad-), veteranos A (de 30 a 40 años), veteranos B (de 41 a 50), veteranos C (de 51 a 60) y veteranos D (de 61 en adelante), todas ellas con dos clasificaciones, masculina y femenina. En la primera edición, José Manuel Vieito fue el ganador, mientras que hace un año le arrebató el título Marcos Antonio Seijo. En chicas se impusieron Yolanda Gutiérrez y Deirdre Mc Dermot.