Tocará sufrir. El Liceo no pudo dar el paso casi definitivo para lograr el campeonato doméstico. Quedaban cuatro puntos. El objetivo era llegar a Lleida con la posibilidad de que un empate sirviese para sellar el título. Sin embargo, el partido no salió según lo esperado. El cuadro herculino no supo sentenciar el partido en el segundo período. Erró demasiado de cara al marco contrario y acabó cediendo un empate en los últimos minutos del encuentro. El resultado deja un sabor agridulce a un Palacio de Riazor que apoyó a los suyos. De todas formas, el equipo coruñés sigue dependiendo de sí mismo para coronarse el mejor conjunto de hockey español.

El duelo comenzó cuesta arriba. Baliu adelantaba al Igualada con un disparo lejano en los primeros minutos de partido. El Liceo supo reaccionar al golpe. Eduard Lamas puso las tablas en el marcador. El encuentro fue un ida y vuelta. El Liceo quería ponerse por delante cuánto antes mientras que el equipo catalán también ponía en aprietos al guardameta local.

El primer tiempo terminó con susto. Los visitantes vendían cara su piel. Todo cambió tras el intermedio. El equipo coruñés culminó la remontada con un nuevo tanto de Eduard Lamas. Poco después Toni Pérez aumentaría la distancia en el marcador. El partido parecía encaminado hacia el triunfo local. Pero fue entonces cuando los nervios salieron a la palestra. Bargalló desperdiciaba una falta. Las ocasiones se sucedían, pero la falta de puntería era una constante en los hombres de Carlos Gil.

En la recta final del choque se esfumarían los tres puntos. El Igualada ponía el sufrimiento en el Palacio de Riazor con el tanto de David Cáceres. A poco más de dos minutos de la conclusión, nuevo varapalo para el Liceo. Un disparo lejano de Oriol Vives ponía las tablas en el marcador. Los hombres de Carlos Gil volvieron a perdonar al equipo catalán. No supieron aprovechar la superioridad numérica de los últimos segundos. Incluso Josep Lamas desperdició una falta ante el portero visitante.

Al final, el empate deja un sabor agridulce. El lado positivo es que el Liceo todavía depende de sí mismo para ser campeón. Si gana en el feudo del Lleida se adjudicará la OK Liga. Un empate o una derrota obligaría a ver qué hace el FC Barcelona en el partido que disputa en la cancha del Igualada. Ambos encuentros se disputarán el próximo sábado, a las 20:00 horas. El cuadro herculino espera recuperar el cetro del hockey nacional dos décadas después.