"Quiero disfrutar por encima de todo, pero también voy a por todas", decía antes de debutar en el Mundial de patinaje artístico de Reus. Y al final, Aida Vieites se llevó las dos cosas. Su sonrisa permanente demostraba lo bien que se lo estaba pasando mientras sobre la pista tarraconense ejecutaba su programa largo. Y la quinta posición final, solo superada por las tres patinadoras italianas y la eslovena Lucija Mlinaric, sabe a medalla aunque la coruñesa no se haya subido al podio. Quinta de Europa y del mundo para la representante del CP Maxia en un año para enmarcar.

El programa corto ya la había aupado al reducido elenco de las favoritas. Incluso le abría el sueño de las medallas. De hecho, ayer, en el largo, salió a competir en el último grupo, el de las cinco mejores del mundo y entre las que se iba a repartir las tres selectas plazas en el podio. Fue la encargada de abrirlo. Errores de recepción tras los saltos le costaron algunas décimas, pero en general fue una actuación limpia, elegante y con mucha dificultad en los elementos.

Aunque repite posición con respecto al Campeonato de Europa, las sensaciones son mucho más positivas en el Mundial. Sus notas mejoraron con creces. En Roccaraso, su programa corto recibió una valoración de 103 puntos que en Reus se fue hasta los 121. En Italia, el largo no llegó al 8,5 de media, con algunas puntuaciones por debajo incluso del 8. Ayer, el juez canadiense y el brasileño le otorgaron un 8.5, la peor de todas sus notas. La mejor se fue hasta el 9,3. Y todo ello en su primer año como internacional en la categoría sénior. Y es que a la coruñesa le ha llegado la madurez deportiva tarde, con 26 años, en una carrera en la que la constancia ha sido su principal aliado. Con unas características físicas envidiables y perfectas para este deporte, no se empeñó en triunfar rápido, sino que pasito a pasito y de la mano de Rosa García -que también llevó a Sabela Rodríguez y Enrique Pardo a la internacionalidad- se ha hecho su camino a la gloria.

El oro se lo llevó la italiana Debora Sbei, que ya había sido también la mejor en el programa corto. En el largo, pese a una caída, volvió a repetir en lo más alto de la clasificación con 531,700 puntos finales. Le siguió su compatriota Silvia Lambruschi, que remontó cuatro posiciones con respecto al corto -había sido cuarta- pero se quedó lejos del título con 524,300. La tercera de las italianas, Silvia Nemesio, fue la perdedora del día al quedar cuarta (514,600). Porque la que cerró el podio fue la eslovena Lucija Mlinaric (520, 500). La campeona de Europa repitió medalla en el Mundial al colgarse el bronce y una plata en la combinada. Aunque su mayor éxito de 2014 ha sido recuperarse del cáncer que le diagnosticaron en septiembre del año pasado. Terminó la terapia en mayo. Cuatro meses después, se subió al podio del Mundial.