Saint Omer es un pequeño municipio del norte de Francia que cuenta con casi 15.000 habitantes. A ellos se sumará a partir de agosto Martín Barros, más conocido como Neto. El coruñés, que vivió en las Azores hasta hace una semana vistiendo los colores del Candelaria, hace las maletas para defender la portería del Saint Omer galo.

"El objetivo es luchar por ganar la liga", dice ilusionado. Y no es para menos. El guardameta afronta esta nueva etapa como "otra experiencia más para aprender". Del hockey portugués no solo se lleva buenos recuerdos y algunos amigos, también conocimientos que le sirven para seguir creciendo como portero. "Es una liga diferente porque se corre más y llegan más. En las directas, por ejemplo, no salen a regatear y chutan. También son más efectivos", analiza.

El Candelaria bajó el telón de la liga portuguesa desde la décima plaza, aunque Neto cree que "se podría haber hecho más". "Podríamos haberlo hecho mejor porque nos quedamos a cuatro puntos del séptimo y quizá tendríamos que haber acabado ahí". Ahora, no obstante, es momento de hacer las maletas y cambiar el portugués por el francés. "Ya me he apuntado a clases porque quiero llegar con los deberes hechos", comenta entre risas.

La pretemporada arranca el 10 de agosto y desde ese momento se pondrá a las órdenes de Fabien Savreux, también seleccionador del combinado francés absoluto que este verano competirá en el Mundial. De todas formas, el primer contacto con el Saint Omer llegó a través de su anterior técnico, Sergi Punset. "Conversé con él y me preguntó si tenía algo pensado para el futuro y si me apetecía ir a Francia. Le dije que sí, claro", recuerda. Además, el portero herculino tomó la decisión basándose en las buenas recomendaciones de Gerard Teixidó. "Fue rival de los de mi quinta muchos años y le pregunté a él, que estuvo allí dos años. Me habló genial del club".

Neto ya conoce Saint Omer, pues jugó allí el Campeonato de Europa sub 19. Esta vez llega para quedarse y tiene claro cuál es el reto que se marca su nuevo equipo: "Vamos a pelear por ganar y eso es muy importante". El conjunto francés acabó la pasada campaña en la cuarta posición y participó en la Copa CERS, en la que volverá a competir el próximo curso. "En ligas nacionales es muy difícil ser primero. En Portugal están Benfica y Oporto, y en España Barça y Liceo. Allí, aunque también es una liga fuerte, el Saint Omer puede dar guerra y luchar por ganar la liga".