Marta Domínguez, acusada por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) de anormalidades en el pasaporte biológico que apuntan a un presunto dopaje, agota esta semana ante el Tribunal de Arbitraje (TAS) la jurisdicción deportiva.

La atleta palentina no asistirá personalmente a la audiencia del TAS que durante hoy y mañana examinará en su sede de Lausana los recursos presentados por la IAAF y la AMA contra su absolución en un caso de anomalías en su pasaporte biológico.

Si fuera hallada culpable, Marta Domínguez se enfrenta a una suspensión de cuatro años, que solicita la IAAF, o de entre dos y cuatro, que es la petición de la AMA por lo que consideran un caso de dopaje sanguíneo. La sanción podría incluir la anulación de los resultados obtenidos por la atleta desde agosto de 2009, lo que implicaría la pérdida del título mundial de 3.000 metros obstáculos que obtuvo en Berlín, así como la plata de los Europeos de Barcelona 2010.

Marta Domínguez estará representada en Lausana por su abogado, José Rodríguez. Un grupo de científicos, expertos en la materia, testificarán por videoconferencia. "Somos optimistas porque tenemos argumentos de mucho peso", dijo el abogado.