La Real Sociedad ha desvelado que será el Panathinaikos, segundo clasificado de la liga griega, el equipo con el que jugará mañana en Anoeta el penúltimo partido de la pretemporada.

El conjunto heleno supondrá una buena vara de medir a doce días del inicio de la competición liguera, porque es un habitual en Europa y se ha reforzado para la presente campaña con jugadores como Essien o los españoles Sergio Sánchez y Fernando Macedo Nano.

La Real, que se estrenará en Riazor contra el Deportivo, recupera así el partido de presentación ante su afición, que ha estado huérfana de este amistoso en las once últimas temporadas ya que la visita del Madrid hace seis años se hizo dentro de las celebraciones del centenario del club donostiarra.

Los aficionados que se acerquen en plena Semana Grande al campo de Anoeta podrán ver en directo al portugués Bruma, el jugador más destacado de la pretemporada, que ayer obvió los deficientes resultados de los partidos de verano y afirmó que "hay que seguir trabajando muy duro para llegar bien al inicio de Liga".

El delantero cedido por el Galatasaray, tras entrenarse en Zubieta con sus compañeros, dijo que el equipo "se hará más fuerte" a medida que vayan incorporándose compañeros que todavía no lo han hecho, como Carlos Vela, el defensa Diego Reyes o el brasileño Jonathan de Jesús.

Y no solo se trata de llegadas, también algunos dicen adiós a la entidad vasca. La Real Sociedad y el defensa Liassine Cadamuro acordaron ayer la rescisión del contrato que unía al futbolista con el club hasta 2016, por lo que el internacional argelino queda libre y desvinculado totalmente de la disciplina blanquiazul.

Cadamuro pone fin a una experiencia de siete temporadas en San Sebastián, adonde llegó con 20 años procedente de las categorías de base del Sochaux galo, país en el que jugaba, ya que tiene también nacionalidad francesa por nacimiento.

Fue un futbolista importante en la mejor temporada de los últimos años de la Real, cuando los donostiarras se clasificaron como cuartos y accedieron el 1 de junio de 2013 a disputar la Liga de Campeones.

Tras incorporarse al filial realista, Cadamuro ascendió en 2011 al primer equipo y disfrutó de oportunidades con su compatriota Philippe Montanier, pero hace dos años, tras la marcha del técnico francés, fue cedido al Mallorca.

No tuvo fortuna en las islas y la pasada temporada se repitió la fórmula de la cesión al Osasuna, pero también el experimento resultó fallido. La Real Sociedad renunció a incorporarle a pesar de tener un año más de contrato y ha optado por la rescisión amistosa y pactada con el jugador.