El Manchester City, liderado por el argentino Sergio Kun Agüero, sonrojó en el Etihad Stadium al Chelsea, que quedó en evidencia, en los sótanos de la clasificación de la Premier, que desde ahora domina el conjunto del chileno Manuel Pellegrini. El preparador sudamericano se dio una particular satisfacción. Una victoria sin paliativos ante el cuadro del vigente campeón, que entrena Jose Mourinho, un técnico empeñado en crearse enemigos casi en cada esquina.

De entrada, el cuadro londinense ya iniciado el curso concediendo ventaja a sus rivales en la Premier. Está sin conocer la victoria en partido oficial desde que arrancó el ejercicio. Perdió contra el Arsenal la Supercopa y empató ante el Swansea en la primera jornada de la Liga. Ahora, en el Emirates, ya ha sufrido su primer y doloroso revés. El City irrumpió en el choque con las ideas más claras. Con determinación y obsesionado en encontrar la meta de Asmir Begovic, sustituto del belga Thiboaut Courtois, sancionado tras la expulsión que sufrió en la pasada jornada.

El bosnio, de hecho, sostuvo a su equipo en pleno festival ofensivo del City. Respondió con la mano a dos disparos del Kun Agüero, que pudo marcar de nuevo minutos después. No falló a la media hora el astro argentino. En una combinación con el marfileño Yaya Touré disparó, raso, por la derecha, fuera del alcance de Begovic. El City tomó ventaja.

El partido se abrió tras el descanso. El Chelsea buscó el empate de forma clara. Encontró el camino directo hacia el área de Joe Hart pero sin precisión para marcar. Mantuvo el tipo el cuadro local, que salió airoso de ese momento clave. El belga Eden Hazard, en el 70, pudo lograr el empate, cuando en una jugada con Diego Costa encontró la respuesta de Hart a un buen disparo. Ahí, murieron las ocasiones londinenses.

A continuación se le marchó el partido. El Chelsea se quedó sin ideas y sin fuerzas, mientras que el City se rehizo a tiempo golpeando donde más le duele al conjunto de Mourinho. Fue en un córner, y no en uno de los desbordes de Sterling a Ivanovic, donde Silva encontró la cabeza de Kompany, quien dejó en evidencia eso sí al defensor serbio. Un zapatazo de Fernandinho ya en el minuto 85 confirmó el momento dispar de dos serios candidatos al título, con cinco puntos de diferencia ya en la tabla.

Críticas del entrenador luso

El entrenador del Chelsea, el portugués Jose Mourinho, calificó como ficticio el 3-0 que su equipo encajó en el Etihad Stadium ante el Manchester City, del que dijo que debió terminar con nueve jugadores porque Fernandinho y Yaya Touré merecieron ser expulsados. "Deberían haber acabado el partido con nueve. El codazo de Fernandinho era de tarjeta roja. Touré Yayá debió ver la segunda amarilla en el 80", argumentó el preparador luso, que criticó, además, a sus futbolistas en las acciones de los goles encajados. "El segundo y el tercer gol proceden de errores individuales de mis jugadores y cuando esto pasa mereces perder", añadió Mourinho tras la dura derrota encajada ante el City.

En el otro partido de la Premier disputado ayer, el Arsenal logró su primera victoria a costa del Crystal Palace. Después del pobre estreno en el Emirates con una dolorosa derrota (0-2) ante el West Ham United, los de Arsene Wenger sumaron los tres primeros puntos aunque eso sí llegaron gracias al tanto en propia meta del defensor Damien Delaney. El francés Olivier Giroud puso por delante a los gunners en el primer cuarto de hora, pero Joel Ward se encargó de poner las tablas apenas unos minutos después. Los de Wenger no acertaron a desplegar el juego que se les presupone como candidatos a poner fin a una sequía en Premier de más de una década. Al final, sufriendo y con gol en propia, los londinenses lograron una primera victoria sobre la que buscarán cimentar un inicio de temporada mucho mejor que el desastre del año pasado, el cual terminó lastrando su actuación en la Premier.