La estadounidense Allyson Felix, la mujer más elegante que pisa las pistas de atletismo del mundo, añadió el título mundial de 400 metros a su colección de medallas de oro en Campeonatos del Mundo, que alcanza ya la suma de nueve, tras imponerse en la final con la mejor marca mundial del año (49.26) por delante de la joven bahamesa Shaunae Miller (49.67). Su primer oro en los 400 metros.

Las tres medallas estuvieron por debajo de los 50 segundos. A continuación de Miller llegaron las cuatro jamaicanas, Shericka Jackson (44.99), Christine Day (50.14), Stephenie McPherson (50.423) y Novlene Williams-Mills (50.47).

En su sexto Mundial, Allyson Felix, de 29 años, comparecía con ocho medallas de oro en su historial (tres en 200, cinco en relevos), invicta en tres carreras y una marca de 49.89 en semifinales que reflejaba su buen momento.

Cuatro años antes, en Daegu, Felix hubo de conformarse con la plata. En la ciudad coreana intentó el doblete 200-400, pero ahora se ha concentrado en esta última distancia con el propósito de hacerse con su primer título. Un viejo objetivo de esta brillante velocista.

La estadounidense tomó la cabeza desde el disparo y fue aumentando la diferencia con sus rivales de modo que a la salida de la última curva, cuando encaró la meta con la zancada de sus largas piernas, el desenlace de la carrera estaba cantado.

En salto de altura, la española Ruth Beitia cumplió el pronóstico y se clasificó por la vía rápida para la final, mientras que David Bustos se metió en las semifinales de 1.500 metros en una sexta jornada de competición que ha dejado cinco españoles eliminados. Beitia superó en su primer intento el listón situado a 1.92 metros, la marca que resultó necesaria para acceder a la final que se disputará mañana (12.30 hora española). Con tres saltos realizados y sin apenas desgaste, la cántabra intentará al menos repetir su bronce de Moscú 2013 en una pelea por las medallas con rivales de relieve como Anna Chicherova o Blanka Vlasic.