La selección española cumplió con el pronóstico y se impuso a la de Islandia por 73-99 sin brillantez, en la cuarta jornada del grupo B del Europeo 2015, con Pau Gasol (21 puntos y 7 rebotes) y Nikola Mirotic (22 y 5) como los jugadores más destacados.

Con este resultado, España, que se enfrentará a Alemania en la última jornada de hoy, puede optar al segundo o tercer puesto si vence a los anfitriones.

El equipo español salió con las ideas claras. Juego abierto para crear espacios a los pívots, mientras que en defensa la zona era el mejor método para evitar que los hombres altos españoles hicieran kilómetros innecesarios detrás de su par.

Islandia también sabía lo que tenía que hacer. Derrochar entusiasmo, entrega, fuerza, velocidad y trabajo en defensa, mientras que en ataque cualquiera podía lanzar a la menor oportunidad, de tres normalmente.

Salvo el 2-0 inicial para los islandeses, España hizo mejor sus deberes con un Nikola Mirotic especialmente inspirado. El guión se siguió con precisión porque en el minuto 7 el marcador era de 8-15 y sólo Mirotic (11 puntos) y Pau Gasol (4) habían anotado.

Un ligero relajamiento español y un par de canastas islandesas finiquitaron el primer cuarto con 16-20.

La defensa española no acabó de centrarse, lo que unido a que los nórdicos entraron en racha, permitió que el marcador se igualase, 28-28 y comenzara a reflejar las primeras ventajas islandesas, 34-30.

Cuando el desánimo estaba a punto de cundir, dos triples de Pau Ribas y otro de Sergio Rodríguez devolvieron las ventajas al lado español.

Al descanso, 36-41 y la sensación de que relajarse sería una mala decisión ante un equipo entusiasta, sin nada que perder y dispuesto a entregarse al máximo.

En la continuación, la defensa española se reactivó mínimamente y la ventaja española creció.