Siete alpinistas murieron hoy a causa de una avalancha registrada en el macizo de Ecrins, en los Alpes franceses, según el último balance del accidente.

Cuatro de las víctimas mortales, entre las que no había ninguna mujer, eran de nacionalidad alemana y los otros tres eran originarios de la República Checa, todos de edades comprendidas entre los 39 y los 51 años.

El coronel del Pelotón de la Gendarmería de Alta Montaña Christian Flagella, confirmó a Efe que, además, había una octava persona herida, con un "traumatismo en el fémur".

Esta última es una montañera de nacionalidad alemana, que será operada mañana en el Hospital de Briançon, adonde fue trasladada tras el accidente y donde los investigadores encargados del caso recogerán su testimonio en cuanto sea posible, según indicó el diario "Le Dauphine" en su página web.

Los cuerpos de las víctimas fueron igualmente trasladados esta tarde a Briançon, primero en un helicóptero de la gendarmería del Dôme des Ecrins, lugar donde tuvo lugar la tragedia, y luego por vía aérea, añadió el rotativo.

El desprendimiento de nieve tuvo lugar hacia las 12.00 hora local (10.00 GMT) en el pico Dôme de Neige des Écrins, de 4.015 metros de altitud, en una jornada en la que no había "alertas particulares" de los servicios de meteorología.

El siniestro se registró a unos 3.900 metros, junto a la localidad de Pelvoux, en una cima frecuentada por alpinistas no expertos dado que su ascensión no es particularmente complicada.

Aunque de retorno de su misión de rescate los socorristas informaron de que "las condiciones en el lugar donde ocurrió la avalancha son invernales, tras haber registrado importantes nevadas este fin de semana en esa altitud", señaló "Le Dauphine".

El Pelotón de Gendarmería de Alta Montaña de Briançon estuvo a cargo de las labores de búsqueda y rescate de los montañeros, que habían partido en tres expediciones distintas.

Se trata de una de las avalanchas más mortíferas del año en Francia, después de que el pasado enero seis personas de nacionalidad francesa perdieran la vida en el valle del Queyras, también en los Alpes.

Además, tres alpinistas, dos austríacos y un italiano, fallecieron el pasado abril a causa de otro desprendimiento de nieve en el macizo de Ecrins.