El Atlético venció en Anoeta, aupado por un Griezmann estelar, autor de un primer golazo y mejor futbolista rojiblanco sobre el césped, a la Real Sociedad, víctima de los nervios, y que concluyó el partido con nueve jugadores.

El conjunto local no tuvo casi tiempo de situarse en el terreno de juego y empezar a generar algún peligro que animara a la grada, porque a los nueve minutos marcó Griezmann el gol que dejó expedito el camino hacia la victoria atlética. El francés, en su segunda visita a Anoeta como jugador colchonero, no quiso celebrar el tanto por respeto a sus excompañeros.

El jugador francés se hizo con un balón en propio campo rojiblanco y atravesó la autopista que dejó libre la zaga donostiarra para plantarse frente a Gero Rulli, al que batió de forma magistral con una bella vaselina para acreditar su excelente calidad.

Rojiblancos y blanquiazules rivalizaron en intensidad y también en falta de profundidad, lo que convirtió el encuentro en plano y previsible para sufrimiento de una hinchada local preocupada por el panorama que se presentaba en caso de derrota.

Cholo Simeone movió ficha mediada la segunda parte para intentar romper la hegemonía infructuosa en el juego donostiarra, que estuvo cerca de marcar por medio del colombiano Jackson en propia portería en un saque de esquina, y buscó las habilidades del belga Ferreira Carrasco para rematar el encuentro.

David Moyes también hizo algún movimiento tardío desplegando todo el arsenal que acumulaba en su banquillo, Jonathas y Bruma fueron sus exponentes, pero tampoco cambiaron las cosas tras estas modificaciones y el partido siguió soporífero.