Los árbitros gallegos vienen reclamando hace años la democratización de la normativa para poder elegir a su presidente, pues la norma faculta al máximo responsable de la Federación Galega de Fútbol a nombrar directamente a quien desee. Ayer, Rafael Louzán recordó que él no había elaborado los actuales estatutos: "Esto viene funcionando así toda la vida". Fueron las palabras de Louzán a la facultad que tiene de designar libremente al responsable de los árbitros. Pero carece de memoria, pues a mediados de los años ochenta Óscar Medín Prego fue elegido presidente por los propios colegiados en unas elecciones que se celebraron en todas las delegaciones de Galicia.

Medín Prego, actual vicepresidente del Comité Nacional de Árbitros que preside Sánchez Arminio, lideró una revuelta de todo el colectivo arbitral que acabó con el mandato de Naya, arraigado en el cargo desde hacía más de dos décadas. Era la época de la transición, cuando Basilio Caramés cedía ante la candidatura de Julio Meana, exdirectivo del Deportivo y ex presidente del Sporting Ciudad, al frente del fútbol gallego. Óscar Medín, a través del voto de los árbitros, llegó a la presidencia del Comité Técnico. Fue el único mandatario de los colegiados elegido directamente por sus compañeros. También entonces regían los actuales estatutos.

Desde entonces, nunca más pudieron los colegiados elegir a su representante. En buena parte porque había satisfacción con el proceder de José García Cabreros, mandatario hasta la llegada de García Liñares a la federación. El expresidente y alcalde de Cerceda prometió a los árbitros que podrían decidir sobre su presidente. "Lo hizo cuando accedió a la presidencia; como también lo hizo Louzán a principios de año", recuerda un colegiado coruñés. Es lo que reclaman los árbitros en la actualidad, y es posible que la solicitud sea atendida por Louzán para acabar de cerrar la crisis. Hasta que adopten una acuerdo, o de nuevo decida Louzán directamente, la responsabilidad de los árbitros gallegos recaerá sobre el director técnico del colegio gallego, Julio Amoedo Chas, y sobre el secretario general de la organización, Eduardo Galán.