El Barcelona dejó encarrilada la eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey contra el Espanyol, al que goleó 4-1 en un duelo que el equipo de Constantin Galca jugó los últimos quince minutos con nueve futbolistas por las expulsiones de Hernán López y Diop. Un derbi a la antigua usanza, caliente desde que se puso en marcha hasta que finalizó, con Pau López como estrella por lo que llegó a evitar, pero también por haberse enfrentado contra todo el Barça en un choque en el que saltaron chispas.

El Espanyol empujó e inauguró el marcador. Caicedo regateó a Mascherano tras un pase de Asensio y se quedó solo ante Ter Stegen, al que batió (0-1). Messi también tuvo fortuna en el minuto 13, cuando logró igualar el partido y subió la temperatura del campo. Poco antes del final del primer tiempo, el argentino lanzó una falta directa y firmó el 2-1. Los problemas para el Espanyol se incrementaron en el 49, cuando Iniesta habilitó por la banda a Messi y éste, en un pase raso, envió el balón a Piqué y el central marcó el tercero (3-1). El Barcelona dio un paso adelante para someter al Espanyol, ampliar la ventaja y celebrar los debuts de Arda Turán y Aleix Vidal. Neymar cerró el partido en el minuto 88.