El Atlético de Madrid asaltó Gran Canaria ayer con un eficaz encuentro que tumbó (0-3) a la UD Las Palmas en la vigésima jornada de la Liga BBVA, tres puntos con la firma de nuevo del francés Antoine Griezmann y una sobriedad defensiva que mantiene en lo más alto de la tabla a los de Simeone. El conjunto canario sufrió un duro castigo a pesar de firmar un buen encuentro. Los de Quique Setién llevaron el peso del partido y fueron mejores durante muchos minutos ante un Atleti que, eso sí, volvió a demostrar su oficio.

Ambos equipos aceptaron un tú a tú en los primeros minutos, una presión con avisos en ambos lados del campo, pero un solo balón a la red. Filipe Luis se incorporó al ataque con un zarpazo, inalcanzable para Javi Varas, que supuso el primero de la tarde canaria en el minuto 17. Oblak se encargó de abortar los tres disparos con peligro de los locales en el primer tiempo, dos de ellos de Castellano.

Con poco el Atleti se marchó al descanso por delante, pero en la segunda mitad quiso mejorar. Incómodo el equipo de Simeone, tras el paso por vestuarios hizo retroceder a Las Palmas, que se quedó sin mordiente. El Cholo se preparó para aprovechar los espacios del tramo final y dio entrada a Carrasco, pero el partido se le fue de entre los dedos a Las Palmas en un fatídico minuto. Roque Mesa rozó el poste de Oblak tras una gran triangulación local y en la siguiente jugada, en el segundo error de los de Setién, Griezmann se plantó en la meta rival, tras pase de Koke, para hacer el segundo. Con 20 minutos por delante el Atleti tumbó la fe canaria y aún el francés rubricó otra gran noche con el tercero rojiblanco.