La Copa del Rey de baloncesto A Coruña 2016 vivió ayer su pistoletazo de salida con el sorteo de los emparejamientos de cuartos de final, así como el cruce de semifinales, en un acto que tuvo lugar en el Ayuntamiento herculino y que no estuvo exento de polémica por la ausencia del equipo local, el Básquet Coruña, entre los invitados. Discordias aparte, el espectáculo en el Coliseum del 18 al 21 del próximo mes de febrero está garantizado en una de las ediciones más abiertas de los últimos años. "Cualquiera puede ganar", se cansaron de decir los representantes de los equipos, aunque el Valencia, como campeón de invierno, se presenta como rival a batir., por más que en el horizonte se vislumbre una posible final entre los dos clásicos del baloncesto nacional. El conjunto naranja se medirá al Herbalife Gran Canaria y el vencedor de esta eliminatoria jugará en semifinales contra el ganador del duelo entre el Barcelona Lassa y el Dominion Bilbao. Por la otra parte del cuadro, derbi madrileño entre el Madrid, vigente campeón, y el Montakit Fuenlabrada mientras que el equipo que ejercerá como anfitrión, el Río Natura Monbús Obradoiro, se verá las caras con otro de los favoritos, el Laboral Kutxa Baskonia.

"Querido Obra, estáis en casa", saludó Xulio Ferreiro a los representantes del equipo santiagués, el presidente Raúl López, el entrenador Moncho Fernández y los jugadoras Santi Yusta y Adam Wazcynski. Pero el alcalde coruñés también quiso reivindicar lo propio sin olvidarse del OAR, de Fernando Romay y del Básquet Coruña. Entre el público, ningún representante del equipo local entre los asistentes. Desde su casa, Tito Díaz escribía un mensaje incendiario a través de su cuenta de Facebook: "La ACB parece que no tiene ni idea de que en A Coruña hay un equipo de baloncesto que representa a la ciudad en la segunda categoría, la LEB Oro, además de 500 niños y niñas en sus equipos de formación, y con muchos años de hacer baloncesto a sus espaldas. Para ellos no existimos. El fútbol sí, sin embargo. Pues muy bien...". Una hora después, todavía le duraba el calentón. "Es lo que nos queda, el derecho al pataleo. No sé de quién es la culpa, pero no han contando con nosotros para nada", se lamentó. "Pero ya no solo con el Básquet Coruña, es que mi club y yo por supuesto lo defiendo. Es que no hay nadie del baloncesto de la ciudad".

No se contó con el deporte de la canasta local, pero sí con el fútbol. Víctor Sánchez del Amo y Lucas Pérez, entrenador y jugador del Deportivo, ejercieron como manos inocentes del sorteo, por lo que fueron los encargados de sacar las bolas de los equipos y deparar los enfrentamientos. "Fue un poco raro que estuviera el entrenador del Deportivo y no el del Básquet Coruña", reflexiona el lucense. La competición tiene al Obradoiro como anfitrión. "Nunca 70 kilómetros estuvieron tan cerca", tendió puentes Ferreiro. En el Básquet Coruña entienden que el papel protagonista sea para los compostelanos, pero no el total ostracismo para un club con muchos niños en su cantera, que está trabajando para hacer crecer el baloncesto en la ciudad y en Galicia y que los últimos años incluso ha luchado por ascender a la ACB al clasificarse para el play off entre los mejores de la LEB Oro. Por la tarde, la ACB contactó con Tito Díaz para pedirle disculpas y asegurarle que desde ahora el Básquet Coruña será tenido en cuenta por la organización.

La polémica no puede hacer olvidar la oportunidad de disfrutar del mejor baloncesto. El Valencia, que acabó invicto la primera vuelta con un récord de 17 triunfos, puede ser el rival a batir. "Sería aventurado decir que somos favoritos, pero esperamos llegar bien", explicó Víctor Luengo, su director deportivo. Su rival será el Gran Canaria, quinto con diez triunfos y siete derrotas. El que gane se medirá con el que resulte vencedor del duelo entre el Barça y el Bilbao. Los culés, segundos en la liga regular con solo dos partidos perdidos, son favoritos pero también huyen de esa etiqueta. "Tenemos que ir quemando etapas y estar preparados para cuando llegue la cita", analizó Rodrigo De la Fuente. Mientras, para los vascos, clasificados a última hora, "estar en la Copa ya es un éxito".

Del otro lado del cuadro, el vigente campeón, el Madrid. El conjunto blanco ya fue campeón de las otras dos ediciones de Copa celebradas en A Coruña, en 1989 y 1993. "Este año hemos sido un poco irregulares y este torneo es muy difícil", recordó Alberto Herreros. Se enfrenta a un Fuenlabrada que ya le ganó en la liga. Con el calor del público contará el Obradoiro, aunque sea lejos del Fontes do Sar. Los compostelanos se clasificaron como anfitriones pese a que son decimocuartos. Eso no les impide soñar frente a otro de los favoritos, el Laboral Kutxa Baskonia, que triunfa tanto en la liga, en la que es tercero, como en la europea. Veintitrés años después el Coliseum vuelve a acoger el mejor baloncesto. Drazen Petrovic y Arvidas Sabonis ya esperan sucesores.