El Barcelona se clasificó por sexto año consecutivo para la semifinal copera tras derrotar al Athletic (3-1), en un partido en el que los de Ernesto Valverde se adelantaron en el marcador y ofrecieron una magnífica imagen mientras tuvieron aire.

El primer cuarto de hora del Athletic fue de cine. Dominó el ritmo y la pausa del partido frente a un Barça con muchas dificultades para crear fútbol, motivado absolutamente por la composición de su medular, con Javier Mascherano de ineficaz maestro de ceremonias.

En quince minutos, los de Ernesto Valverde marcaron un gol y tuvieron dos ocasiones para marcar alguno más frente a un Barça descolocado, superado desde la presión muy alta cerca de Ter Stegen hasta por la movilidad de los delanteros, con Aduriz y Williams como estiletes.

La única noticia del Barça en el primer tiempo llegó con un remate de Vermaelen a la red de Herrerín, una jugada anulada por falta previa del defensa del Barça . Tres minutos después Williams silenció el Camp Nou. Al descanso ganaba el Athletic, pero la inercia del partido era ya otra como se comprobó desde los primeros minutos del segundo tiempo y más cuando apareció Messi. El argentino, ausente hasta entonces, recibió un pase filtrado de Sergi Roberto, que tampoco había aportado mucho en el primer tiempo, y puso el balón a Luis Suárez. El uruguayo apareció en el segundo palo, aprovechó un resbalón de Balenziaga y empató el partido en el minuto 53 (1-1). El Athletic intentó resistir mientras el Barça apretaba. Piqué remató un centro de Luiz Suárez en el 81 y Neymar sentenció en el tiempo añadido.