Los fantasmas del 2015 han regresado al garaje de McLaren-Honda. La fiabilidad de la que hizo gala el nuevo MP4-31 las dos primeras jornadas (203 vueltas) de los ensayos de pretemporada en el circuito barcelonés de Montmeló se venían abajo la tarde del miércoles cuando un problema hidráulico impedía al británico Jenson Button tomar parte en la sesión vespertina. Y los problemas de Button los heredaba ayer Fernando Alonso.
El bicampeón español estaba impaciente. Con ganas. Fue el primero en salir a la pista para iniciar la jornada de trabajo... pero tras un par de vueltas de instalación el MP4-31 se paraba. Aquello tenía mala pinta -fuga en el sistema de refrigeración del propulsor- y el piloto asturiano, cabizbajo, se iba del garaje del equipo. Regresó un par de veces para seguir el trabajo de los mecánicos de McLaren y de Honda pero aquello no mejoraba y no volvería a subirse al monoplaza. Una jornada perdida y la fiabilidad del McLaren de nuevo en entredicho.
Entre Alonso y Button, así, sólo lograban completar 257 vueltas al circuito de Montmeló en estas cuatro primeras jornadas de trabajo. Únicamente por delante de los modestos Manor (254) y lejísimos de las 675 acumuladas por el británico Lewis Hamilton y el alemán Nico Rosberg, que han devorado kilómetros con sus Mercedes dando una imagen de superioridad casi insultante.
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No fueron los más rápidos en ninguna jornada pero tampoco utilizaron los neumáticos superblandos que sí pusieron otros equipos. Como hizo ayer, por ejemplo, Ferrari para que Kimi Raikkonen firmara el mejor crono de la jornada en 1:23.477. Pero Hamilton, que estrenó el nuevo morro que llevarán las "flechas de plata" esta temporada, hizo un maratón de 96 vueltas a un ritmo constante de 1:27 bajos con los medios. Los equipos regresarán el próximo lunes a Montmeló para afrontar las cuatro últimas jornadas de prueba.
