Old Trafford y Mestalla vivirán sendos sueños de remontada en los duelos nacionales Manchester United-Liverpool y Valencia-Athletic, mientras que el Basilea, anfitrión de la final de la Liga Europa 2016, buscará la sorpresa en el campo del defensor del título, el Sevilla.

La vuelta de los octavos de final se presenta complicada para dos conjuntos con grandes aspiraciones que están viviendo temporadas tempestuosas y deficientes como el Valencia y el United.

El equipo que dirige Gary Neville está obligado a voltear el 1-0 que encajó en San Mamés ante un Athletic que está enrachado pero que en la ida perdió la ocasión de sentenciar prácticamente la eliminatoria.

El Valencia no acaba de encontrar el camino del buen juego y los resultados positivos. El ejemplo de su alterada campaña lo vivió en la última jornada liguera al perder en el derbi ante el colista Levante.

El equipo de Louis van Gaal, que también está en la Liga Europa tras ser eliminado de la Liga de Campeones, no anda mucho mejor en ninguna de las competiciones. Incluso en esta tiene que remontar un marcador más adverso, el 2-0 sufrido en Anfield.

El Basilea, anfitrión de la final, que se jugará en St. Jakob Park, acude al Ramón Sánchez Pizjuán dispuesto a dar la sorpresa ante el Sevilla, campeón de las dos últimas ediciones.

El cuadro de Unai Emery cumplió con su mala tendencia esta temporada -aún no conoce la victoria en sus desplazamientos- y tan solo pudo alcanzar un empate a cero.

El Sevilla, además, tiene las bajas de hombres importantes como el ucraniano Konoplyanka, el francés Nzonzi y Vitolo.

El otro equipo español participante, el Villarreal, espera resarcirse de su derrota en Sevilla en Leverkusen, a donde acude con una renta importante tras el 2-0 que logró en El Madrigal.

Los de Marcelino García Toral estaban en plenitud en la Liga BBVA hasta el comienzo de mes. Pero las dos derrotas han complicado algo su situación.