Mauro Triana es el actual recordman gallego de los 200 metros lisos en pista cubierta con un tiempo de 21.45. Primero en el ranking de la Federación Galega de Atletismo y séptimo en el nacional de esta modalidad, el atleta coruñés fue capaz de pulverizar esta marca ya en cuatro ocasiones. El año pasado - temporada 2014-2015-, Mauro rompió el récord de Isidoro Hornillos después de treinta y cuatro años de dominio gracias a una marca de 21.69 en el Campeonato de España absoluto. La presente temporada -el 21 de febrero se cumplió un año del nuevo récord-, Triana volvió a superarlo en el Campeonato de España sub23 al marcar un crono de 21.65. Pero su talento le llevaría todavía a dar un paso más allá. Dos semanas después, durante la disputa del Campeonato nacional en categoría absoluta, celebrado en Madrid, hizo 21.65 en semifinales y en la final 21.45. Una gran marca que le aupó al cuarto puesto de la clasificación. "El récord fue de casualidad. Trato de dar lo máximo en cada entrenamiento y obviamente conseguir un nuevo récord es una satisfacción, pero el objetivo que trato de marcarme cada temporada es llegar bien a los torneos celebrados en verano", expresa el atleta.

Lo que no es casualidad es la pasión que Mauro demostró por el atletismo desde niño: "Comencé con 8 años. Me quedé porque no me gustaba demasiado -ironiza Mauro Triana- y al cumplir 14 decidí tomármelo como algo más serio". Seis años como atleta en los que la figura de su entrenador José Carlos Tuñas está muy presente. "Llevo con él toda mi vida deportiva", indica. Sin embargo, Mauro decidió cambiar el Coruña Comarca, club que le vio crecer durante un lustro, por el Playas de Castellón. "Ambos clubs llegaron a un acuerdo y , personalmente, vi una buena oportunidad para poder crecer al tener la posibilidad de participar en el Campeonato de Clubs, u otros torneos internacionales". Precisamente, con Playas de Castellón, podría aspirar el 28 de mayo a revalidar el título que ganó el equipo castellonense la pasada temporada. "Todavía no sé con certeza si podré ir, aunque soy consciente de que hay posibilidades. Lo sabré pocas semanas antes", explica Mauro. Y añade: "Otro objetivo que tenía, ya antes de fichar por el Playas, eran los Juegos del Mediterráneo sub 23, que se celebrarán en Túnez, pero son el mismo día. En caso de poder elegir, competiría por mi club".

La posibilidad de participar en un Europeo es otro de los objetivos que Mauro Triana pretende alcanzar en el futuro. "Me quedé a tres centésimas de conseguir la mínima por lo que seguiré trabajando para conseguirlo", explica. Una constancia que hasta la fecha se resume en diez medallas tan solo en campeonatos nacionales. Un oro, cinco platas y cuatro bronces adornan su vitrina por el momento. Pero las posibilidades de entrenamiento no siempre suponen una tarea fácil para una modalidad como el doble hectómetro. En palabras del propio Mauro Triana: "Entrenarse en esta modalidad en Galicia es imposible porque no tenemos instalaciones. Cada temporada partimos con un hándicap añadido, de ahí mi necesidad de participar en todas las citas de atletismo que pueda".

A pesar de las dificultades, esta prueba sigue siendo su favorita "Mi prueba por excelencia es la de 200 metros lisos porque es la que mejor se me da por mis condiciones físicos. El 100 no lo corro cuando estoy mejor de forma, y el de 400 sería un reto de cara a un futuro cercano. La pasada temporada estaba a punto de empezar cuando me llamó la selección". Una llamada que a Mauro Triana no lo dejó indiferente: "El año pasado fui convocado para competir en sub 23 para un relevo 4x100, y esta temporada debuté con la absoluta con la intención de preparar un nuevo relevo de cara al Campeonato de Europa". Aunque si pudiese destacar un momento especial de esta temporada, lo tiene claro: "Cuando quedé tercero en el Campeona Absoluto de Castellón, donde sólo me superaron los dos atletas que tienen las mejores marcas de España de 200 m.l", explica con satisfacción.

Respecto a su futuro, Mauro Triana prefiere mantenerse prudente: "No sé todavía donde estaré el año que viene. Prefiero marcarme pequeños objetivos a corto plazo". De hecho, el sueño olímpico lo percibe como un reto demasiado lejano. "Tengo una marca de 21.23 al aire libre y la mínima es 20.50 para los juegos. Queda un largo camino para llegar a una competición de un nivel tan exigente". Y concluye, el atleta coruñés: "Mi próxima meta es tomar partido en alguno de los campeonatos de este verano. Mis planes para el año que viene no están fijados".