El Málaga se dejó dos puntos en su lucha por la permanencia y la posibilidad de jugar en Europa la próxima temporada al empatar en casa (1-1) frente al Espanyol, que se adelantó con un gol del senegalés Pape Diop en un partido falto de intensidad y ritmo.

El conjunto andaluz, dormido, sin profundidad y romo en ataque, no hilvanó ninguna jugada de peligro ante la portería de Pau López en los primeros treinta minutos, frente a un Espanyol más certero, que jugó cómodo con el marcador a favor. La segunda vez que el Málaga pisó el área rival, Juanpi Añor fue empujado por un defensa y el árbitro señaló penalti. Lo convirtió Cop, que hizo el empate definitivo.