El Granada y el Málaga empataron sin goles, resultado que supone un paso atrás para los locales en sus opciones de salvación, pese a que amplían a dos puntos su renta sobre el descenso, y hace que los visitantes alcancen prácticamente su permanencia al sumar 41 puntos.

Fue un partido tan igualado como malo y con muy pocas ocasiones de gol, en el que a los granadinos les pudo la ansiedad por lo mucho que se jugaban y en el que los visitantes mostraron su buen hacer, aunque con un poco más de ambición podían haber ganado.

El Málaga estuvo mejor asentado en la primera mitad que el Granada, al que le pudo la presión del partido, aunque dispuso de la mejor ocasión a la media hora de juego en un mano a mano que Success resolvió mal ante el portero mexicano Ochoa.

El gran arranque de encuentro visitante provocó que Andrés tuviera que intervenir con acierto dos veces en los tres primeros minutos ante sendos cabezazos de Camacho y de Cop. Y ahí se acabó todo.