Las XXIV Olimpiadas Maristas terminaron esta temporada con ocho medallas para el centro coruñés Cristo Rey, convirtiéndose así en el tercer centro más competitivo del torneo. Tres días de competición en los que el colegio consiguió las medallas de oro en las competiciones deportivas de natación tanto de braza como espalda masculina gracias a Sergio Pose, y en mariposa femenina con Antía Fernández. También consiguió la misma nadadora un bronce en braza y mariposa. En atletismo cayó otra medalla en peso femenino de la mano de Sabela Leiro.

A título colectivo el colegio coruñés logró alzarse como campeón de básquet femenino y subcampeón de fútbol masculino. Completaron el pódium de máximos medallistas de las Olimpiadas Maristas el Externato Marista de Lisboa, en primera posición con veinte y cuatro medallas, y el Colegio Maristas Carcavelos, en la segunda con dieciséis. A estos se sumó la participación de los colegios de Salamanca, Oviedo, Palencia, Ourense, León, Badajoz, Burgos y Valladolid. A lo largo del campeonato tan sólo los centros de Oviedo y Valladolid no alcanzaron ningún primer puesto de los once centros que participaron en las pruebas.

En total, setecientos cincuenta deportistas de los colegios maristas repartidos por España y Portugal compitieron en las disciplinas de bádminton, tenis de mesa, natación, voleibol, baloncesto, fútbol sala y atletismo demostrando un alto nivel competitivo .

La ceremonia de clausura se realizó en el polideportivo del Colegio Maristas. Además de las medallas correspondientes al primero, segundo y tercer clasificado en todas las disciplinas, el Colegio Marista de Lisboa recibió el Trofeo Centenario. Un premio que certifica al centro luso como el gran campeón de las olimpiadas al ser el centro con mayor número de medallas obtenidas: ocho de oro, diez de plata y seis de bronce.